La bodega Cavas del 23, ubicada en la región argentina de Mendoza, acaba de inaugurar una curiosa propuesta enoturística que viene a enriquecer una ya de por sí muy interesante ruta, la Ruta del Vino de Mendoza. Se trata de un nuevo hotel, Posada Cavas, cuya principal particularidad, es que se ha construido aprovechando los antiguos 10 depósitos de hormigón de 100.000 litros de capacidad como habitaciones y salas para la realización de catas.
Cavas del 23 está situada en la localidad de Rodeo de la Cruz, y es una bodega cuya antiguedad data de 1923. Elaboran sólo vinos jóvenes, sin aporte de madera, bajo las marcas Imperio de Sentidos y Beviam. La inversión realizada para la adaptación turística de las viejas instalaciones ha sido de 300.000 euros.
Espero que esta iniciativa sea todo un éxito, especialmente por la ausencia de alojamientos de calidad, aparte de hoteles de cadenas norteamericanas con precios excesivamente altos, en esta zona, donde la mayor parte de bodegas han sabido entender perfectamente el enoturismo como un negocio generador de importantes ingresos, además de reforzar el posicionamiento de su marca.
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