¿Qué es el Vinmonopolet?
Vinmonopolet es una cadena de tiendas bajo propiedad y gestión del Estado noruego que tiene el monopolio de la venta minorista de bebidas alcohólicas dentro del país. Por este motivo, su cuota de mercado alcanza prácticamente el 88% del total de las ventas de vino. Ante esta situación, resulta evidente que conseguir que un vino determinado esté a la venta en Vinmonopolet es decisivo para conseguir el éxito del producto en el mercado noruego.
A grandes rasgos, el monopolio no es más que cadena de distribución alimentaria, que vende sus productos a través de su red de tiendas distribuidas por toda la geografía noruega y, de forma más residual, a través de internet. No obstante, también conserva características particulares que distinguen su organización y gestión.
El Vinmonopolet es un órgano público y persigue con su acción un objetivo socialmente deseado (limitar la demanda de alcohol en el país a través del control en la distribución, la fijación de precios y la eliminación del ánimo de lucro privado en el mercado minorista del alcohol). Por este motivo, se provee de acuerdo a planes previamente estipulados y métodos que garanticen el tratamiento imparcial de proveedores y productos, tratando de responder a la demanda latente de los consumidores.
Lo anterior implica que una bodega, de forma particular, no tiene poder de influencia directa sobre Vinmonopolet ni capacidad para interactuar con él, ya que solamente es posible presentar un producto a través de un importador que disponga de la correspondiente licencia gubernamental.
Vinmonopolet funciona a través de un complejo (pero transparente) sistema de categorías y listas, cada una de ellas con métodos de entrada y funcionamiento diferentes y su propia oferta de producto.
¿Cómo funciona el Vinmonopolet?
La acción de Vínmonopolet se proyecta en torno a dos ejes fundamentales:
- En primer lugar, la persecución del fin social que justifica su existencia.
- En segundo lugar, la necesidad de dar un servicio y una atención de calidad al cliente.
Por su carácter de empresa de propiedad estatal hace necesario que su labor se guíe no sólo según estándares de calidad en el servicio, si no también que su gestión se base en la objetividad, la neutralidad y la transparencia. Por esto, la labor de Vínmonopolet no se basa en decisiones arbitrarias ni en factores estrictamente de mercado.
Con periodicidad bianual (normalmente en diciembre y junio), la organización edita su Plan de Producto y Mercado, que marca la política de compras y guía la actividad del monopolio para el siguiente semestre. Este Plan se elabora en colaboración con importadores, sumilleres y expertos del mundo del vino y trata de anticiparse a la demanda y dar respuesta a las tendencias actuales de consumo, tratando de elaborar un catálogo variado en cuando a tipos de vino, procedencias y variedades. Por lo tanto, este documento es la principal guía de la que disponen los importadores para saber qué vinos busca incorporar el monopolio en un momento dado.
En este Plan de Producto semestral, Vínmonopolet expone de forma muy concreta las características de los productos que desea incorporar a su catálogo y convoca a los importadores registrados a que presenten referencias para el proceso de selección, según dichos criterios.
Con todas las referencias que se presenten se lleva a cabo el proceso de selección, bajo el formato de una cata a ciegas por parte de expertos, método a través del cual se escogen, de forma objetiva y transparente, los vinos que se venderán en las tiendas del monopolio. En esta cata se tienen en cuenta no sólo el sabor y aroma de los caldos, sino también otros criterios como el precio o la capacidad productiva y/o logística del productor, factores que se ponderan y puntúan, dando lugar a un ganador en cada categoría demandada, que pasará a formar parte del catálogo. A través de este sistema se incorporan al año unas 300 nuevas referencias, que llegan a las tiendas unos 6 meses después de resultar seleccionadas en este tipo de catas.
Las referencias ganadoras se incorporan al catálogo y por tanto a la venta al público a través de la llamada Lista Básica (Basisutvalget). Este listado agrupa el grueso de la oferta disponible en los lineales de Vinmonopolet y la admisión de un vino al listado garantiza un periodo inicial de 12 meses en venta al público para cada referencia seleccionada. De este período, los 6 meses iniciales son de introducción, pero durante los 6 meses restantes las ventas del vino serán comparadas con los objetivos estimados antes de su lanzamiento y con las ventas del resto de referencias en su rango de precios y tipo de producto.
Si tras este periodo inicial el producto no cumple las expectativas fijadas por el monopolio, se retira de la venta o se reajusta su distribución. Posteriormente, tras el periodo inicial de un año, las ventas son analizadas en periodos bimensuales para decidir la permanencia o retirada de los productos, por lo que las salidas y entradas de referencias concretas en esta Lista Básica (y con ello, de los lineales) son frecuentes y ocurren cada año en enero, marzo, mayo, julio, septiembre y noviembre.
Existe un segundo listado, llamado Lista de Lote Único (Partitutvalget), para cuyos productos se aplican los mismos criterios de selección mediante cata a ciegas y previa convocatoria en el Plan de Producto que ya se ha descrito. La diferencia de estos vinos y los que se incorporan a la Lista Básica es que estos son comprados por Vinmonopolet en lotes de forma puntual, sin intención de que su suministro continúe en el tiempo. Normalmente, estos lotes son adquiridos para llevar a cabo promociones, ventas temáticas (por ejemplo, de alguna región vinícola concreta o país) o
para introducir una pequeña selección de algún producto más exclusivo, de mayor calidad y precio, que requiere una distribución más limitada y que por sus características no tiene cabida en el catálogo básico.
Aunque estas vías de selección y acceso al catálogo son las únicas bajo demanda expresa del monopolio, existen otros 3 listados para los que los importadores pueden presentar libremente sus productos, sin requisitos concretos.
La más importante de ellas es tal vez la Lista de Prueba (Testutvalget), pues puede resultar una forma de acceso a los lineales de Vinmonopolet sin necesidad de pasar por el procedimiento de selección estándar. Con una cierta periodicidad (normalmente, cada dos o tres meses), el monopolio abre un plazo para que los importadores presenten una referencia que deseen incluir en este listado. Lo usual es que se genere lista de espera, debido a que las cuotas para acceder por esta vía son de apenas unas 25 o 30 referencias y la demanda es muy elevada. Esto es así porque una vez que el vino es seleccionado en periodo de prueba, estará disponible a la venta en una selección de tiendas Vinmonopolet (de un par de decenas de establecimientos seleccionados) por un periodo de 6 meses. Si las ventas en este periodo cumplen las expectativas, el vino en cuestión accede a la Lista Básica, obteniendo una distribución mucho mayor.
Los dos últimos listados tienen en común el hecho de que Vinmonopolet no adquiere los productos que aparecen en ellos a los importadores, sino que son mantenidos en inventario por estos, se venden bajo pedido y Vinmonopolet retribuye al importador posteriormente por dichas ventas.
Suelen dar cabida a los vinos que no han conseguido entrar en la Lista Básica o en periodo de prueba, o que han sido retirados por sus bajas ventas, pero aun así permanecen en la cartera del importador. Por ejemplo, los vinos que integran la Lista para Pedidos (Tilleggutvalget), aunque no están disponibles en las tiendas, si lo están a través de la tienda online de la web de Vinmonopolet. Por ello, los importadores deben mantener stock en sus inventarios y comprometerse a su suministro bajo las mismas condiciones que los productos de la Lista Básica, es decir, dentro de
un periodo de 72 horas tras recibir un pedido, a cualquier punto de Noruega y sin pedido mínimo (incluso por una única unidad).
Por último, el resto de productos que no cumplen los requisitos para su inclusión en ninguna de las categorías anteriores, pueden estar disponibles en la Lista Adicional (Bestillingsutvalget), en venta también bajo pedido, pero bajo condiciones más laxas, lo que permite que se incluyan productos más raros que no formen parte del inventario del importador, sino que puedan ser importados del exterior expresamente.
¿Cuántos puntos de venta tiene el Monopolio del Vino de Noruega?
A la hora de gestionar la red de puntos de ventas de Vinmonopolet, existen dos aspectos a los que la propia empresa pública y el Ministerio de Salud y Asuntos Sociales se deben enfrentar:
Por una parte, la tendencia natural a expandir gradualmente la red de tiendas bajo la premisa de ofrecer un mejor servicio al público.
Por otro lado, la preocupación acerca del impacto que esta extensión de la red pueda tener en el consumo de alcohol.
Lo cierto es que, dentro de los límites de una política cuidadosa de planificación, la red de ventas crece gradualmente año tras año, alcanzando en 2014 los 300 establecimientos.
Según datos de la empresa, la cobertura geográfica actual permite que el 89% de la población noruega viva en un municipio con Vinmonopolet y que el 96% viva a menos de 30 kilómetros de uno de los establecimientos. Por número de municipios, 223 cuentan con punto de venta del monopolio, frente a 193 que no (aunque se trata de municipios de muy pequeño tamaño, que apenas agrupan un 11% de la población total, algo más de medio millón de habitantes).
Las tiendas cumplen un doble objetivo:
- Como punto de venta.
- Educar al cliente en hábitos saludables y culturales respecto al consumo, a fin de cumplir con el objetivo social que justifica la existencia misma del monopolio.
Los horarios de apertura de Vinmonopolet son de lunes a viernes de 9 a 18:00 y sábados y víspera de festivo de 9 a 15:00. Los establecimientos permanecen cerrados los domingos y festivos nacionales.
No todos los establecimientos son, lógicamente, iguales. Por el contrario, existen hasta 6 categorías diferentes de tienda, clasificadas según sus ventas anuales, superficie y número de referencias disponibles, para ajustar mejor la oferta disponible a la demanda del lugar donde se ubica.
Las tiendas de mayor tamaño (categoría 1) se ubican en los núcleos de mayor población y cuentan, como mínimo, con 1.800 referencias distintas. En el otro extremo, las poblaciones de menor tamaño cuentan con establecimientos de categoría 6, cuyo número de referencias se sitúa entre 150 y 250 (190 de media). La tendencia actual de aperturas se está centrando en aumentar este tipo de tiendas de pequeño formato para dar así mayor cobertura geográfica a la red y llegar de esta forma a municipios en los que no se tiene aún presencia. No obstante, esto dificulta enormemente las tareas de logística, pues estos núcleos suelen estar muy aislados.
La oferta de vino en el Vinmonopolet
El Vinmonopolet ofrece al público casi 11.000 referencias distintas de vino, que abarcan una extensísima horquilla de precios (desde el producto más barato, el blanco LGI Les Deux Deuces 2010, a un precio de 64,30 coronas -unos 7,65 euros-, al más caro, un champán Klug Vintage Clos du Mesnil 2000 a 6.649,90 coronas -unos 785 euros-, siendo el tinto más caro un Chateau Lafleur Pomerol 2009, a 12.500 coronas la botella -cerca de 1.470 euros-).
Artículo redactado según la información proporcionada por el Estudio de Mercado de la Oficina Comercial de la Embajada Española de Oslo, disponible en nuestra Zona Premium.
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